viernes, 25 de enero de 2008

Capitulo IV

Banda sonora: si fueras mi enemigo, de Andrés Cepeda.



MARIANA ROBA A SANTIAGO

Mariana sabe que la mamá la ve alejarse, lo sabe porque es más inteligente de lo que todos creen, pero es conveniente que la gente siga engañada, especialmente Natalia y su abuela, de lo contrario la una no iría por ella cada día, y la otra le pegaría como lo hace con los otros nietos, recuerda picara la escena de los buñuelos, claro que sabe decir bien la palabra, pero es mejor que nadie se entere. Deja caer a conciencia un hilo delgado de saliva que América, la profe que no le cae bien, limpia con asco mal disimulado.
En esas está cuando ve llegar a Santiago, un niño de su edad con los ojos llenos de pestañas, tiene síndrome de down y la única persona con la que habla en la escuela es ella, está enamorado y Mariana a veces se hace la tonta y lo deja verle un poco por encima de las rodillas, entonces se pone rojo como un tomate. En la lonchera de Shrek lleva ese niño un universo de delicias que Emerita (la abuela) nunca le compra a Mariana porque no alimentan, no es fácil robarlo, es gritón, no habla con nadie pero grita como endemoniado y señala al culpable con un dedo rígido como el de una estatua.
Lo mira coqueta, le lanza sonrisas magentas, le toca la cara de cachetes redondos y rojos, le canta una canción que lo hipnotiza, pero Santiago no suelta la lonchera, la niña no se resigna, solo aplaza el robo porque ya los están llevando al salón de clases. Dibuja en su cuaderno un retrato de santiago, le pregunta:
- ¿Sabes quién es?
Niega con su cabeza llena de mechones lisos de color castaño, no tiene ni idea quien es ese con cara de papa que pintó Mariana.
- Tú, tonto
La mira, sonríe, se le caen las babas gruesas y espesas, no es a drede, no le avergüenza, solo la mira y tiene ganas de darle todo lo que trae en la lonchera, pero lo olvida pronto, toda su atención la tiene un gato que se come un pájaro en uno de los recovecos de su imaginación. Mariana intenta traerlo de nuevo a tierra, pero no puede, le toca la mejilla, sopla en sus orejas, sube un poco la falda, pero es todo vano, parece que el tesoro resguardado por el ogro verde no caerá en sus manos esta vez.
La profesora América les dice con una sonrisa fingida que ya pueden salir, que el sol y los pajaritos los esperan afuera, Mariana toma en una mano su lonchera y en la otra la mano izquierda de Santiago que aprieta contra el pecho el cofre en disputa, unos niños de otro grado juegan con un balón y el niño mira embelesado, no le ha contado a nadie pero quiere ser futbolista, Mariana se da cuenta que hay una ventana por donde colarse hasta los dulces que la trasnochan, se acerca a uno de los jugadores, le sonríe coqueta, le regala miradas de pestañas rizadas, le pide que invite a Santiago, lo llaman, el no puede creerlo, corre por la cancha de cemento y siente que lo hace en el camp nou, deja tirada la estorbosa lonchera, su infaltable aliada y hada que ayuda a cumplir sueños le grita:
- Santi, voy a cuidarte la merienda.
La mira agradecido desde la gloria, Mariana se despide con un adiós de mano, corre a una sombra donde devora como loca la mitad de todo, porque a Santiago todo se lo empacan por pares. Sonríe triunfante, ha burlado una vez más la jaula de la abuela.

6 comentarios:

Christophe dijo...

Cosas de niños bien narradas, me gustaron los detalles de lo relatado.

Beatrix dijo...

K: gracias, este capitulo ya me estaba dando como miedo ponerlo.. no se bien por que

Elipse dijo...

ja,ja!Excelente música y la narración por demás deliciosas, siga, siga señorita, nunca se detenga!
Aplauso para quien burló la jaula de la abuela!jaja1
Abrazos, muchos!

Disco Stu dijo...

Pobre Santi, es así como la gente deja de lado la inocencia y se va impregnando del mal que nos dejan los grandes como legado. Divertida narración.

Beatrix dijo...

E: tenia susto de lo que dirias.. gracias!!!
Disco stu: si, pobre Santi, pero sera que el si llega a perder la inocencia??

Elipse dijo...

Susto?Por favor!Ud tiene talento explotelo!
mis saludos!